sábado, 26 de noviembre de 2011

Aún queda gente con corazón

Buenas de nuevo, hoy voy a explicar una situación en la que me he encontrado y que por unos momentos,  sin darme cuenta le he regalado una pizca de alegría y atención a alguien.

Estando en un paso de peatones, a mi izquierda una abuelita( muy educada ella), Perdone joven, podría ayudarme a cruzar, evidentemente la ayudo pero la pobre mujer va cargada de bolsas a lo cual le pregunto:  ¿va usted muy lejos? no aquí a la esquina me ofrezco a llevarle las bolsas y al llegar al portal y observar la expresión de su cara me doy perfecta cuenta, de que ese gesto que para mi a sido insignificante, para la mujer a sido como si le hubieran echo un gran regalo.

Es con estas situaciones a lo que me refería días atrás, a veces un simple gesto para ellos no tiene precio.

Aquí os dejo un vídeo en el que se ve lo que pasa le gente que se siente sola, pero también os pido que prestéis atención a las personas que salen en el vídeo, que ya sea por amor, dedicación, compasión, o simplemente el saber que un día nosotros nos podemos encontrar así, hacen una labor digna de agradecer, apreciar y si cabe aprender de ella.


martes, 22 de noviembre de 2011

Problemas o enfermedades que afectan a los mayores

A veces no somos conscientes de las necesidades de nuestro mayores, cuando algo falla o creemos que no va bien tendemos a decir que está enfermo, pero muchas veces no es cierto. Llega un momento que al igual que los niños, los abuelos empezaran a reclamar atención, cariño, cuidados simplemente será una manera de recordarnos que están ahí que siguen a nuestro lado, que no son un mueble y evidentemente que siguen en el mundo de los vivos. Hubo alguien que en su día dijo:


Vivimos dos infancias, una de bienvenida y dulce y una de despedida y más amarga

Así pues podríamos decir que cuando nacemos todo es nuevo, aprenderemos a ver, cojer,  comer, escuchar, andar, pensar, recordar, hablar, etc... pero llegados a cierta edad parecerá volverse alreves empezaremos a dejar de ver, a dejar de comer, a perder la oída, a no poder andar, a olvidar, a perder el habla, etc..., por todo eso volvemos a remarcar que quizá tendríamos que procurar darles el final que es justo y se merecen porque nos guste o no todos absolutamente todos llegaremos a la vejez.


Cuando decimos que están enfermos, tendríamos que analizar a que enfermedad nos referimos, para entendernos yo bajo mi punto de vista nombrare a un grupo que creo hay que tener en cuenta.

Enfermos psicológicos, porque la situación de abandono les a llevado a ello,

Depresión: situación en la que entra mucha gente, pero respecto a la mayor es muy común porque empiezan a sentirse inútiles, un estorbo, una carga a los que no les pasan las horas y empiezan a pensar si vale la pena existir, estar aquí y demás por su estado en si.

Nerviosismo: alteración en el sistema nervioso que se manifiesta con inquietud, intranquilidad e irritabilidad.
Es una reacción del organismo hacia situaciones de preocupación, miedo o impaciencia.Una de las causas en relación a el tema que abordamos es la menopausia.

SÍNTOMAS:

  • Irritabilidad
  • Impaciencia
  • Inquietud
  • Insomnio
  • Alteración del apetito
  • Dolor de cabeza
  • Fatiga
  • Falta de concentración
Síndrome de diógenes: las personas que padecen esta enfermedad mayoritariamente es gente mayor que vive sola, que no nos referimos a que no tengan recursos.A parte de la acumulación de basura, muebles viejos, elementos sin utilidad ninguna, etc...los síntomas más habituales son:

  • Aislamiento voluntario
  • Inobservancia de las normas sociales
  • Descuido de la higiene personal, el hogar, del vestir
  • Ruptura de las relaciones sociales
  • Actitud de hostilidad hacia el entorno

Con este grupo lo que he querido dar a entender,  es que no todos los enfermos son de ir al médico, hay un alto porcentaje en el que la única medicina o antídoto es: un abrazo, una sonrisa, un beso, escuchar, hacer que ellos te escuchen, simplemente decirles un te quiero.







 

lunes, 21 de noviembre de 2011

Como veo a nuestros mayores

Antiguamente la mujer no estaba tan introducida en el mundo laboral, particularmente creo que todas las mujeres de hoy en día preferimos pertenecer a la clase de trabajadora, puesto que eso nos hace sentir más igualitarias a los hombres(aunque, nos guste o no siguen habiendo diferencias),nos da más libertad,  independencia personal y monetaria, en definitiva considerar-nos auto-suficientes.
Pero por otro lado y basandonos en el tema que vamos a abordar, hay que reconocer que antiguamente la mujer por el echo de no trabajar fuera de casa a lo que se dedicaba en mayor medida era:
  1. Los queaceres domésticos.
  2. El marido.
  3. Los niños.
  4. Y evidentemente al cuidado de esos mayores de los que ahora nos olvidamos.
Tiempo atrás los jóvenes se casaban y en un alto porcentaje, ya fuese por costumbre, necesidad, comodidad, etc... se quedaban a vivir en el hogar paterno, eso facilitaba mucho el echo de atenciones a los mayores, eso y también el respeto que se prodigaba por la gente mayor puesto que hasta que fallecía quién llevaba el mando en el núcleo familiar era él.

Ahora muchos de los ancianos han ido quedando más de lado, muchos de ellos no tiene ni siquiera familia en el sitio donde residen.

Lo peor de todo es que a muchos de ellos es la propia familia los que los deja de lado. Los ven como una carga un estorbo y actualmente con la situación económica se da en muchos casos falta de solvencia económica para mantenerlos o proporcionarles los cuidados necesários.
Les dan así unos malos tratos psicológicos casi imperceptibles, pero eso conlleva a hacer entrar a la persona en un estado de falta de autoestima, puesto que en la nueva etapa en la que entran requiere una re-estructuración personal a causa de los canvios fisiológicos, psicológicos, sociales y familiares que lo hacen sentir vulnerable. 


  

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